1. Las alergias son genéticas y se las puedo heredar a mis hijos.
Las alergias, como la mayoría de las enfermedades, se deben a múltiples factores; si bien existe una
predisposición genética, el ambiente juega un papel importante, ya que la contaminación, las infecciones
y el ambiente pueden influir en el desarrollo de estas.
El hecho de tener alergia sí predispone a tus hijos a presentar alergias en comparación con otros, pero el no ser alérgico(a), no los protege ante ellas.
2. El retrasar la exposición previene el desarrollo de alergias
Esta práctica tuvo su auge hace tiempo y continúa empleándose, pero se ha demostrado que entre más
temprano se exponga el cuerpo a las diferentes sustancias del ambiente, se evita una reacción exagerada
a lo que no es dañino, como el polen o el polvo.
Lo mismo pasa con las mascotas, ya que incluso desde el embarazo se puede exponer a la madre a gatos, perros, etc., para que el bebé no desarrolle alergia y su sistema de defensas conozca desde muy chico estas partículas.
3. “Cuando estaba chiquito me hice alérgico a la penicilina”
Esta es una de las frases más comunes en la consulta. Se asocia a que una infección en la etapa
infantil, hasta en el 85% de las veces es por virus y no requiere antibiótico y, dentro de los síntomas
de infección viral, afecta la piel y genera el famoso “rash” que se asocia con la administración de
penicilina.
Se ha estimado que en promedio un 10% de la población tiene alergia a antibióticos, por lo que se necesita ser valorado por un especialista que confirme o descarte esta posibilidad.
4. Las alergias no se curan, pero mejoran con la edad
Primero: existe tratamiento para el control de las alergias, que al suspenderse o volver a exponerse a
lo que se es alérgico, provoca que las molestias regresen. Pero existen tratamientos específicos y
especializados que reentrenan al sistema de defensas para modificar la reacción y atenúan los síntomas
al exponernos nuevamente.
La prevalencia de alergia disminuye con la edad, pero no porque la alergia desaparezca, sino porque el sistema de defensas también envejece y la reacción se vuelve más débil, aunque esto no es una constante y hay personas de la tercera edad con molestias importantes asociadas a alergias.
5. Las alergias no aparecen en los adultos
Si bien las alergias se expresan desde la infancia, es importante saber que se puede desarrollar alergia
en cualquier momento de la vida, ya que es una alteración en el cómo el sistema de defensas reacciona a
sustancias del ambiente, y para esto no hay una edad regla.
6. Las alergias no son una enfermedad importante
Si bien para muchas personas los síntomas de alergia pueden parecer leves y no causar un impacto grave,
se ha demostrado que la calidad de vida de un paciente con rinitis alérgica se ve afectada por la
dificultad para dormir, concentrarse y hacer actividades. Una persona con alergia grave al cacahuate,
por ejemplo, vive con miedo y estrés constante de que sus alimentos contengan pequeñas cantidades de
cacahuate y pueda sufrir una reacción que lo lleve al hospital, esto tiene un impacto en su vida social,
al evitar asistir a restaurantes o aceptar invitaciones a comer con su familia o amigos.
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